De
repente Mario detuvo la conversación, su rostro se volvió serio, incluso
parecía preocupado.
– ¿Qué es lo que ha pasado chico? preguntó
Marta.
– Tengo la sensación de haber estado aquí sentado contigo en
otro momento de nuestras vidas, recuerdo este mismo olor, estas mismas palabras
de nuestra conversación, e incluso, esa misma camiseta que llevas puesta.
Respondió Mario atónito.
Marta
se sorprendió ya que era la primera vez que Mario y ella se veían fuera de la
biblioteca, ambos necesitaban aire fresco en aquella tarde primaveral. – ¿Te encuentras bien
Mario? Insistió ella.
– Si, pero siento que todo esto ya lo viví en otro
momento.
Marta
respiró aliviada. – Lo que te acaba de pasar pequeño se llama Déjà vu.
–¿Qué? ¿Es grave? ¿Me pondré bien?
–Calma pequeño, es simplemente algo maravilloso. Casi todas
las personas experimentan este fenómeno cerebral en algún momento de su vida,
es más, los científicos afirman que es entre los 15 y los 25 años de edad cuando
más se pueden experimentar los Déjà vu.
– ¡Oh! ¿Entonces es algo de mi cerebro?
–Efectivamente, existen muchas teorías sobre el Déjà vu pero
todavía no sabemos cual es la más acertada.
– Me gustaría saber sobre esas teorías Marta.
– Si no recuerdo mal Mario, las teorías que
más peso tienen son la holográfica y
la del procesamiento dual.
– Que nombres tan raros, jamás escuchara nada
igual.
– ¿Cuál
te gustaría conocer primero Mario?
– La holoclásica por supuesto. Contestó Mario
casi sin pensar.
Marta soltó una inmensa carcajada. – Se dice holográfica pequeño y se le atribuye
este nombre ya que relaciona la forma en la que almacenamos nuestros recuerdos
con un holograma.
– Ya no
entiendo nada Marta.
– Tranquilo Mario, poco a poco con el conocimiento.
Almacenar recuerdos como un holograma quiere decir que tú sólo necesitas un
pequeño fragmento de un recuerdo pasado para sentir que has vivido una
situación presente.
–¿A que te refieres con un pequeño fragmento?
– A un olor, una forma, un color o un sonido.
Elementos sensoriales que en algún momento generaron un recuerdo en ti.
– ¡Qué curioso Marta!
– Sin duda. Por lo tanto, lo que te ha pasado
según esta teoría es que aunque estés en este lugar nuevo, hay algún elemento
sensorial que ya experimentaron tus sentidos en algún momentos de tu pasado y
que además se gravó en tu memoria. Por eso tu cerebro lo relaciona con la
situación de ahora.
– ¿Y la otra teoría Marta? ¿Qué dice la otra
teoría?
– La teoría
del procesamiento dual tiene que ver también con la información sensorial
que tu cerebro recibe del exterior, como un olor, una imagen o un sonido. Sin embargo esta teoría se centra en como el cerebro procesa la información no en como la
memoriza. ¿Me sigues Mario?
– Más
o menos Marta, dime un poco más para que pueda hacerme una idea.
– Esta teoría nos dice que cuando tenemos un Déjà vu la parte consciente de tu cerebro se retrasa en procesar
la información que está entrando del exterior. Por lo tanto es tu subconsciente
el que detecta la información unos milisegundos antes. Finalmente cuando la información llega con retraso a la parte consciente, tú sientes que ya lo has vivido.
– Mmmnnn. Es complicada esta teoría Marta.
– Nada es complicado si se entiende Mario. Alguna información sensorial de este ambiente no ha ido por el circuito
neuronal por el que habitualmente va la información nueva que entra en tu cerebro. El circuito del que te hablo hace que
comprendas lo que ves, lo que tocas, lo que hueles…
– Ahora lo entiendo Marta, mi parte consciente. Es decir, he sufrido un Déjà vu ya que, por ejemplo,
tardé en entender lo que estaba viendo sin embargo ya lo estaba viendo.
– Correcto Mario, es increíble tu capacidad
de comprensión.